El aeropuerto internacional de la ciudad mexicana de Nuevo Laredo suspendió sus operaciones este lunes debido a tiroteos registrados en la zona, generados por enfrentamientos relacionados con el crimen organizado. La violencia, que se desató tras la captura de Ricardo González, alias «El Ricky», presunto líder regional del Cártel del Noreste, llevó a que las autoridades mexicanas tomaran medidas para resguardar la seguridad de la población.
La alcaldesa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas, confirmó a través de sus redes sociales que los vuelos programados para este lunes fueron cancelados y reprogramados para el día martes, 4 de febrero. Además, instó a los habitantes de la ciudad a permanecer en sus hogares hasta que la situación estuviera controlada. La aerolínea mexicana VivaAerobús también confirmó el cierre de operaciones, destacando que la medida buscaba garantizar la seguridad de los pasajeros, tripulaciones y personal del aeropuerto.
La captura de «El Ricky», quien enfrenta múltiples órdenes de aprehensión por delitos como extorsión, homicidios y ataques a fuerzas de seguridad, generó una ola de violencia en la región. Ante estos hechos, el consulado de Estados Unidos en Nuevo Laredo ordenó a su personal mantenerse bajo resguardo, como medida preventiva.
Este suceso ocurre en el contexto de un refuerzo de la presencia militar en la frontera norte de México, pues la presidenta Claudia Sheinbaum había anunciado horas antes el despliegue de 10.000 militares en la zona para combatir el tráfico de drogas y el crimen organizado. Esta medida fue tomada tras una conversación con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien había presionado para que México tomara más acciones en este sentido, congelando temporalmente los aranceles del 25 % que había anunciado.
Nuevo Laredo, un importante punto de cruce entre México y Estados Unidos para el transporte de carga, ha sido escenario en ocasiones anteriores de enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos del crimen organizado. En 2022, el consulado estadounidense en la ciudad suspendió operaciones debido a disparos y granadas lanzadas por criminales, tras la captura de otro líder del Cártel del Noreste, Juan Gerardo Treviño, alias «El Huevo», quien fue deportado a Estados Unidos.
La situación en Nuevo Laredo resalta la creciente tensión en la región fronteriza y la violencia asociada al narcotráfico, que continúa siendo uno de los principales desafíos de seguridad para ambos países.