En un tono despectivo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se burló de los países que, según él, están intentando negociar los aranceles impuestos unilateralmente por su administración. «Estos países nos están llamando. Me están besando el trasero. Se mueren por llegar a un acuerdo», dijo Trump en una intervención ante el Comité Republicano.
El presidente estadounidense hizo estos comentarios justo antes de la entrada en vigor de los aranceles adicionales sobre las importaciones, que entraron en efecto este miércoles. Trump afirmó que los líderes extranjeros le suplican para evitar los nuevos gravámenes, diciendo: «Por favor, por favor, señor, llegue a un acuerdo. Haré lo que sea, señor.»
Según la Casa Blanca, al menos 70 países han comenzado a negociar con EE.UU. la reducción de los aranceles, a cambio de medidas que busquen corregir los desequilibrios comerciales con el país. Entre las nuevas medidas anunciadas por Trump el pasado 2 de abril, se incluyen aranceles adicionales del 50% para las importaciones provenientes de China, lo que eleva el total de los aranceles sobre productos chinos a un 104%. Asimismo, se aplicará un 20% a los productos de la Unión Europea (UE) y aranceles de hasta el 50% a más de 50 países.
Estas declaraciones se producen en un momento clave, ya que delegaciones de países como Corea del Sur y Japón se encuentran en Washington negociando los términos de los aranceles, mientras que la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, aliada de Trump, tiene previsto viajar la próxima semana para discutir las mismas cuestiones.
Las nuevas medidas arancelarias marcan una intensificación de la postura proteccionista de Trump y reflejan su voluntad de presionar a los socios comerciales de EE.UU. para que acepten condiciones más favorables para el país.