El ministro de Justicia y Paz de Costa Rica, Gerald Campos Valverde, realizó este viernes una visita oficial al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), la prisión de máxima seguridad ubicada en Tecoluca, San Vicente, El Salvador. Esta visita se enmarca dentro de una gira oficial del funcionario costarricense al país vecino, acompañado por el viceministro de Justicia de Costa Rica, Juan Carlos Arias, y la embajadora costarricense en El Salvador, Lina Ajoy.
Durante el recorrido, que duró casi dos horas, Campos Valverde fue guiado por autoridades penitenciarias salvadoreñas, incluyendo al director del Cecot, Belarmino García. El recorrido incluyó una visita a diversas áreas del penal, como el comedor, la armería y uno de los pabellones donde se encuentran recluidos miembros de las pandillas MS-13 y Barrio 18. García explicó que el centro tiene estrictas rutinas para los reclusos, así como servicios médicos y tiempos definidos para la alimentación.
Al final de la visita, el ministro costarricense expresó que el Cecot refleja un «absoluto respeto a los derechos fundamentales». Además, mencionó que analizarán las “buenas prácticas” observadas en el centro para evaluar su posible aplicación en el sistema penitenciario de Costa Rica.
El Cecot, inaugurado en 2023, tiene una capacidad para albergar hasta 40,000 internos y es considerado un pilar fundamental de la política de seguridad del presidente Nayib Bukele, quien ha impulsado la llamada “guerra contra las pandillas”. Con una inversión de $115 millones, el centro se ha convertido en un símbolo de su estrategia para combatir la violencia en El Salvador.
Cabe destacar que, a pesar de la apertura del centro para la visita oficial, la delegación costarricense no tuvo acceso a la zona donde se encuentran recluidos más de 200 migrantes venezolanos, presuntos miembros del Tren de Aragua, que fueron deportados desde Estados Unidos. El gobierno salvadoreño no ha proporcionado detalles sobre el estado o situación legal de estos detenidos.
La visita de Campos Valverde se produce pocos días después de la realizada por la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, lo que subraya el creciente interés internacional por el modelo de seguridad implementado en El Salvador y la polémica generada por su megacárcel.