El Papa Francisco, quien el pasado domingo regresó a su residencia en la Casa de Santa Marta en el Vaticano tras un período de más de cinco semanas hospitalizado, sigue avanzando en su recuperación. Según informó el Vaticano el martes, el Pontífice se dedica a realizar sesiones de rehabilitación y, al mismo tiempo, continúa con sus actividades profesionales, incluyendo la concelebración de la misa.
El servicio de prensa de la Santa Sede detalló que el Papa está bajo un tratamiento farmacológico y físico, especialmente enfocado en la rehabilitación respiratoria para recuperar plenamente la función de la respiración y el habla. Sin embargo, no se ha especificado cuándo se dará su próxima aparición pública.
Tras una hospitalización de 38 días debido a una doble neumonía que puso en riesgo su vida en varias ocasiones, el Papa de 88 años regresó a su residencia el domingo pasado. En su nuevo entorno, el Pontífice ha estado concelebrando la misa en la capilla del segundo piso, aunque en los últimos días ha tenido pocas visitas, limitándose solo a su círculo cercano de colaboradores.
Se espera que el Papa esté convaleciente durante al menos dos meses, ya que esta ha sido la enfermedad más grave que ha enfrentado desde su elección como Pontífice en 2013, con un pronóstico de salud «reservado» en los días más críticos.
El Vaticano también ha confirmado que el Papa no presidirá la audiencia general de este miércoles. En su lugar, su catequesis será transmitida por escrito. Además, es probable que Francisco no participe en la oración del Ángelus programada para el próximo domingo.
El Papa Francisco hizo su primera aparición pública desde su hospitalización el pasado domingo, cuando se presentó desde el balcón del hospital, visiblemente debilitado y con la voz frágil, para saludar a los fieles que lo aguardaban.