El Juzgado Octavo de Paz de San Salvador resolvió este lunes en audiencia inicial que Erika Márquez Serpas, conocida bajo el seudónimo de «Gatita», será enviada a prisión provisional. La acusación en su contra incluye los delitos de trata de personas agravada, en sus modalidades de explotación sexual y trabajo forzado, así como extorsión y hurto de identidad.

La Fiscalía General de la República (FGR) presentó pruebas que señalan a Serpas como responsable de promocionar servicios sexuales a través de redes sociales y obligar a dos personas a prestar estos servicios sin recibir compensación alguna. Además, la acusada es señalada por extorsionar a una tercera víctima.

Según la investigación, Serpas utilizaba las cuentas bancarias de las víctimas para recibir los pagos de los clientes, con el fin de evadir la detección por parte de las instituciones financieras.

Tras la audiencia, Serpas negó las acusaciones y manifestó que el testigo criteriado había dado un testimonio falso. «Un falso testimonio es penado», afirmó. Además, destacó que las pruebas del caso serán clave en su defensa. “Espero que se preparen muy bien con las pruebas del caso”, dijo mientras abandonaba el centro judicial.

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