Raúl Bringas Nostti, doctor en Historia Socioeconómica, afirmó que los elevados aranceles impuestos por Estados Unidos a productos asiáticos han comenzado a redirigir la demanda hacia otros mercados, lo que representa una oportunidad estratégica para México y Centroamérica.
Durante una ponencia ofrecida en la Embajada de México en El Salvador, Nostti explicó que la administración del presidente Donald Trump mantiene tasas de hasta 30 % sobre China y aranceles aún más altos para otros países de la región asiática, como Laos (40 %), mientras que Taiwán y Vietnam enfrentan un 20 % cada uno.
En contraste, Centroamérica se ve menos afectada: El Salvador, Panamá y Guatemala tienen gravámenes del 10 %, Costa Rica del 15 % y Nicaragua del 18 %. Según el académico, esta diferencia abre un margen de competitividad para que la región pueda aprovechar nichos de mercado que antes eran dominados por Asia.
“Estados Unidos importa grandes volúmenes de productos como la nuez de la India desde Vietnam y la pimienta, ambos cultivos que pueden adaptarse fácilmente en Centroamérica. La clave está en redireccionar la producción tradicional de la región hacia bienes que se han encarecido por los aranceles”, destacó.
Además, subrayó que México y Centroamérica cuentan con la ventaja de la cercanía geográfica con Estados Unidos, lo que reduce costos de transporte y fortalece su posición frente a competidores asiáticos.