El Secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha lanzado una fuerte advertencia a los países y empresas que colaboren con el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. Durante una reciente declaración, Rubio afirmó que Estados Unidos no tolerará que terceros países ni sus compañías petroleras participen en la producción, extracción o exportación de petróleo y productos derivados en conjunto con el gobierno venezolano.
“El régimen de Maduro ha robado elecciones sistemáticamente, ha saqueado a su pueblo y se ha confabulado con nuestros enemigos”, señaló Rubio, quien ha sido un firme crítico de la administración venezolana.
El Secretario de Estado advirtió que cualquier país que permita a sus empresas involucrarse en la extracción o comercio de petróleo desde Venezuela enfrentará severas repercusiones, incluyendo nuevos aranceles y sanciones económicas. Esta medida busca ejercer presión sobre el régimen de Maduro, al que Estados Unidos acusa de violar los derechos humanos y de desestabilizar la región.
La declaración de Rubio refuerza la postura de Estados Unidos de aislar internacionalmente al gobierno de Venezuela y de promover una transición democrática en el país sudamericano. Las sanciones forman parte de la estrategia para limitar las fuentes de ingresos del régimen y fomentar el cambio político en Venezuela.