El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha hecho una declaración contundente este sábado, asegurando que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, será responsable de la vida de los migrantes venezolanos deportados a ese país desde Estados Unidos, si llegara a ocurrirles “algo”.
Durante su intervención, Maduro indicó que Bukele tiene la responsabilidad de garantizar la seguridad de los 238 migrantes venezolanos detenidos en El Salvador, algunos de los cuales han sido vinculados con el Tren de Aragua, una organización criminal. «A Nayib Bukele, presidente de El Salvador, le decimos, usted es responsable. Si le pasa algo a un muchacho de esos, usted es responsable de la vida de todos esos muchachos», expresó el mandatario venezolano, según información difundida por la televisión estatal venezolana.
Este pronunciamiento se produce luego de que el gobierno venezolano exigiera a El Salvador proporcionar información detallada sobre los migrantes deportados. Según las autoridades venezolanas, los migrantes fueron detenidos «ilegítimamente» en El Salvador, donde están bajo la custodia del Centro de Confinamiento contra el Terrorismo (Cecot), en el municipio de Tecoluca.
Maduro también criticó el trato que están recibiendo los migrantes, calificando su situación de “secuestro”. “Más temprano que tarde tiene que entregarlos y liberarlos porque están secuestrados”, afirmó el presidente venezolano, quien además insistió en que los deportados no han cometido ningún delito ni en El Salvador ni en Estados Unidos. En un tono vehemente, comparó los centros de reclusión de El Salvador con los “campos de concentración nazi” que, según él, recuerdan los horrores del régimen de Hitler.
La acusación de Maduro también se sumó a la declaración de Diosdado Cabello, ministro del Interior de Venezuela, quien el viernes señaló a Bukele de ser un «instrumento del imperialismo estadounidense» por permitir las deportaciones de los migrantes venezolanos.
Maduro también destacó el programa “Vuelta a la Patria” que, según él, es único en el mundo, y que permite a los migrantes venezolanos regresar a su país de manera gratuita. “El único país del mundo que tiene un plan vuelta a la patria y pone los aviones y los trae gratis, con amor, es Venezuela. ¿Gracias a qué? A la revolución que tenemos”, agregó en su discurso.
Ante la situación, el presidente venezolano solicitó la activación de todos los mecanismos internacionales de Derechos Humanos de la ONU para garantizar la “protección de los migrantes venezolanos” en El Salvador. La solicitud de Maduro se centra en asegurar que los migrantes detenidos tengan acceso al debido proceso y no sean objeto de represalias o violaciones a sus derechos humanos.
Esta controversia continúa escalando entre ambos países, mientras se intensifican las críticas hacia la administración de Bukele y las deportaciones que han sido parte de los esfuerzos conjuntos entre El Salvador y Estados Unidos para combatir el crimen organizado y la migración irregular.