La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, instó este viernes a los países de Latinoamérica a mantener una «coordinación estratégica» frente a los planes migratorios del próximo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump. Este llamado surge tras una reunión el jueves en Ciudad de México con ministros y representantes de 10 naciones de la región.
«(Planteamos) estar en comunicación, en coordinación, para cualquier estrategia que se plantee desde el Gobierno del presidente Trump, entre los países», declaró Sheinbaum desde Acapulco durante su conferencia matutina.
En el encuentro participaron delegados de Belice, Brasil, Colombia, Cuba, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México y Venezuela, según la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). Durante la reunión, se discutió la integración de una estrategia conjunta para hacer frente a posibles deportaciones masivas prometidas por Trump.
Sheinbaum indicó que ya comenzaron conversaciones para fortalecer la cooperación al desarrollo como medio para reducir la migración forzada. Destacó la necesidad de asegurar condiciones de empleo, seguridad y calidad de vida en los países de origen de los migrantes.
México enfrenta una especial preocupación ante las amenazas de deportaciones masivas, dado que cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en EE.UU. son mexicanos, y las remesas enviadas por ellos representan aproximadamente el 4 % del PIB nacional.
Sheinbaum enfatizó que México insistirá en que EE.UU. realice deportaciones directamente a los países de origen de los migrantes y no a territorio mexicano, señalando que esta postura ha sido bien recibida por líderes regionales como la presidenta de Honduras, Xiomara Castro.
La mandataria sugirió esperar hasta que Trump asuma el cargo el próximo lunes para evaluar las acciones definitivas de su administración. Además, destacó la importancia de un diálogo de alto nivel entre funcionarios de ambos países para definir estrategias conjuntas.
«Nuestro objetivo es que una vez que entre el presidente Trump pueda haber un diálogo de alto nivel con servidores públicos, secretarios y secretarias del Gobierno de México y el Gobierno de los Estados Unidos y que, a partir de ahí, definamos las estrategias conjuntas», concluyó.