El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció este lunes que las protestas contra los resultados oficiales de las elecciones presidenciales, que ratificaron la victoria de Nicolás Maduro, han dejado un saldo de 25 muertes. Saab atribuyó estas muertes a “grupos delincuenciales instrumentalizados” por la coalición opositora Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
En un comunicado transmitido por el canal estatal VTV, Saab especificó que la mayoría de las muertes se registraron en Caracas y el estado Aragua, con siete víctimas en cada región, además de reportes en Bolívar, Yaracuy, Nueva Esparta, Lara, Miranda, Táchira y Zulia. El fiscal también informó que hasta el 2 de agosto, 192 personas resultaron heridas en las protestas, de las cuales 97 son miembros de cuerpos de seguridad del Estado.
Por su parte, la Misión de Determinación de los Hechos en Venezuela de la ONU ha exigido a las autoridades venezolanas “detener inmediatamente la represión e investigar a fondo la avalancha de graves violaciones a los derechos humanos que están ocurriendo”. La ONU documentó 23 muertes entre el 28 de julio y el 8 de agosto, destacando que la mayoría fueron causadas por disparos y que 18 de las víctimas eran hombres menores de 30 años.
La presidenta de la Misión, Marta Valiñas, ha pedido una investigación rigurosa sobre las denuncias de abusos de fuerza por parte de cuerpos de seguridad o civiles armados progubernamentales, subrayando la necesidad de rendición de cuentas.
El gobierno venezolano ha confirmado haber recibido reportes ciudadanos detallados sobre 22 de las 25 muertes a través de una aplicación digital creada por el Estado. La tensión política ha escalado después de las elecciones, con la PUD sosteniendo que su candidato, Edmundo González Urrutia, obtuvo una victoria amplia y publicó el “83,5 %” de las actas electorales para apoyar su reclamo.
Las autoridades y organismos internacionales continúan monitoreando la situación mientras la crisis política y social en Venezuela se agrava.