Al menos 12 personas murieron este viernes al estrellarse un avión de línea que había despegado poco antes de la ciudad de Almaty, en Kazajistán, con unas cien personas a bordo, según un balance oficial.
El aparato, un Fokker-100, de la compañía local de bajo coste Bek Air se precipitó a las 07H22 (01H22 GMT), tras su despegue a las 07H05 del aeropuerto de Almaty. El vuelo debía conectar esta ciudad a la capital Nursultán, más al norte.
Las autoridades de este país de Asia Central dieron en un primer momento un balance de 15 muertos y después revisaron a la baja la cifra y la situaron en 12, según una lista publicada por el Comité de Situaciones de Emergencia y confirmado por el ayuntamiento.
Ocho personas, entre ellas el piloto del avión, Marat Muratbaiev, murieron en el acto, dos después de ser transferidas al aeropuerto de Almaty, y otras dos fallecieron en el hospital.
Entre las víctimas también hay un general del ministerio del Interior, Rustem Kaidarov, de 79 años. Según la agencia de prensa Informburo.kz, una de sus periodistas, Dana Kruglova, también murió en el accidente.
El avión se estrelló en una zona habitada y destrozó una casa, pero las autoridades no dieron cuenta de ninguna víctima en tierra.
A bordo de la aeronave viajaban entre 98 y 100 personas, incluidos cinco miembros de la tripulación, según cifras diferentes dadas por el Comité de Situaciones de Emergencia y el viceprimer ministro, Roman Skliar.
Según el ministerio de Salud, 53 personas están hospitalizadas, entre ellas nueve niños. Diez adultos se encuentran en un estado de «extrema gravedad».
El avión «golpeó la pista»
Según el aeropuerto de Almaty, el aparato «golpeó la pista dos veces con su cola antes de despegar, después de lo cual se inclinó hacia la derecha, en un momento en el que el tren de aterrizaje estaba plegado».
«Empezamos a perder altura y después comenzamos a tambalearnos: el ala izquierda, luego el ala derecha. El avión empezó a temblar y a balancearse a la vez que ganaba altura. Después golpeó el suelo o un edifico», relató a la agencia de prensa rusia Ria Novosti un pasajero, Aslan Nazaraliev. La mayoría de las personas muertas se encontraban en la parte delantera del aparato, afirmó.
El viceprimer ministro kazajo, encargado del caso, confirmó que el avión había chocado con la pista en el despegue «bien por un error del piloto, bien por un problema técnico». Las cajas negras fueron halladas, precisó.
El ministerio del Interior anunció que ha abierto una investigación por «infracción de las reglas de seguridad y de explotación de un medio de transporte aéreo».
Numerosos rescatistas, incluidos varios camiones de bomberos y ambulancias, así como la policía, se desplegaron en la nieve alrededor de las partes dañadas del fuselaje, cerca del área habitada.
En un mensaje de condolencias publicado en Twitter, el presidente Kassym-Jomart Tokayev también aseguró que «los responsables serán castigados severamente de acuerdo con la ley».
POR AGENCIAS