El presidente Nayib Bukele se encuentra realizando una gira en Asia para fortalecer las relaciones diplomáticas y buscar cooperación. Su gira incluye a la República Popular China, lugar donde ya se encuentra y desde mañana comenzará las reuniones con el primer Ministro, Li Keoqiang, y con su homólogo Xi Jimping.
Esta visita se vuelve transcendental porque antes de tomar posesión de la Presidencia, Bukele declaró que iba a evaluar las relaciones diplomáticas que El Salvador, en la administración del FMLN, estableció con ese país asiático. Asimismo, su gran aliado, Estados Unidos, ha criticado estas relaciones.
Precisamente, en las últimas horas se ha conocido que el Consejero de Asuntos Públicos de la Embajada de Estados Unidos, Tobias Bradford, ha declarado a El Diario De Hoy que su país está “evaluando” si alguno de los programas que implementan en nuestro país “puede verse afectado por algún acuerdo que el gobierno acepte”.
“Un número significativo de naciones se han visto arrastradas por acuerdos con el gobierno de China que luego lamentan (…). Nuestro énfasis ha sido advertir y ayudar a El Salvador a no caer en esas mismas trampas”, indicó el funcionario estadounidense.
Según un comunicado de la Presidencia de El Salvador, en la reunión con el mandatario chino, Xi Jimping, Nayib Bukele suscribirá “varios acuerdos bilaterales”, aunque no se detalló cuántos y de qué tratan específicamente.
Por ello, Tobias Bradford recalcó que EE.UU. ha advertido que “no todos los socios son iguales”. “Solo esperamos que estén considerando detenidamente los pros y los contras de esta relación”, agregó.
El Salvador informó sobre las relaciones diplomáticas con China en agosto de 2018 cuando repentinamente el expresidente Salvador Sánchez Cerén, en cadena nacional, anunció el rompimiento de relaciones con Taiwán, un hecho que provocó que Estados Unidos llamara a consulta a la entonces embajadora Jean Manes, quien advirtió de la influencia china en la región.
Por su parte, la última reacción de la relación con China por parte del nuevo Embajador, Ronald Johnson, fue el pasado 10 de octubre cuando le advirtió al mandatario salvadoreño a que actuara con “cautela en su involucramiento con China”.