La deuda estatal de pensiones alcanzó en agosto de 2025 los $10,970.01 millones, tras un incremento mensual de $47.44 millones, según datos preliminares divulgados este martes por el Banco Central de Reserva (BCR).

Entre enero y agosto de 2025, el Gobierno emitió $445.01 millones en nueva deuda previsional, lo que representa una caída del 39.6 % respecto al mismo periodo de 2024, cuando la emisión ascendió a $737.89 millones.

Sin embargo, las cifras del BCR difieren de las publicadas por el Ministerio de Hacienda en el documento Perfil de la deuda del Sector Público No Financiero, que reporta una deuda de pensiones de $11,070.6 millones hasta agosto. Según Hacienda, el saldo se compone de $8,394.8 millones en Certificados de Financiamiento de Transición (CFT) y $2,675.8 millones en Certificados de Obligaciones Previsionales (COP).

Ambos instrumentos corresponden a los ahorros de los cotizantes de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), invertidos en títulos emitidos por el Estado a cambio de una tasa de interés. Los CFT sustituyeron en la reforma de 2022 a los antiguos Certificados de Inversión Previsional (CIP), mientras que los COP reemplazaron a los títulos que emitía el entonces INPEP, hoy Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP).

En términos macroeconómicos, Hacienda calcula que la deuda de pensiones equivale al 30.2 % del PIB, mientras que el BCR la ubica ligeramente más baja, en 29.97 % del PIB.

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