El periodista salvadoreño Mario Guevara, detenido desde el 14 de junio en un centro migratorio de Georgia, cumplió 100 días bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). En una carta dirigida a la comunidad latina en Estados Unidos, afirmó que su único “delito” ha sido ejercer el periodismo y advirtió que, de ser deportado, lo hará “con la frente en alto”.
En el escrito, Guevara lamentó haber sido tratado como delincuente y criticó la política migratoria estadounidense, señalando que el lema de libertad y justicia para todos “es una falacia cuando se trata de inmigrantes”. También agradeció el apoyo de su comunidad y pidió perdón a su familia por el sufrimiento causado.
El comunicador fue arrestado mientras transmitía en vivo una protesta contra el expresidente Donald Trump en el condado de DeKalb, pese a identificarse como miembro de la prensa. Los cargos iniciales fueron desestimados, pero ICE lo mantuvo en detención. Posteriormente enfrentó otro proceso en un condado distinto, que también fue descartado.
Guevara, quien reside en Estados Unidos desde 2004 tras huir de persecución en El Salvador, ha trabajado en medios como Mundo Hispánico y fundó el canal digital MG News. Aunque un juez rechazó su solicitud de asilo en 2012, este año la Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA) reabrió su caso, negándole la libertad bajo fianza a pesar de su condición de padre de ciudadanos estadounidenses y de contar con una visa en trámite.
Su abogado, Giovanni Díaz, recordó que el periodista no tiene antecedentes criminales en dos décadas y cuenta con buena reputación entre medios y autoridades. La ACLU ha presentado un habeas corpus y una moción de emergencia para frenar su deportación, la cual podría ejecutarse en cualquier momento.