El Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) llevó a cabo este miércoles una redada histórica que resultó en la captura de 308 inmigrantes ilegales con antecedentes criminales, entre los cuales se incluyen delitos graves como intento de asesinato y abuso sexual de menores. La operación, realizada en múltiples ciudades a lo largo de todo el país, abarcó lugares como Denver, Filadelfia, Atlanta, Seattle, Baltimore y Miami, y fue supervisada por un alto funcionario de la administración del presidente Donald Trump.
El Director Interino del ICE, Tom Homan, destacó la magnitud de la operación. “En las últimas 24 horas, ICE arrestó a más de 308 delincuentes graves. Algunos de ellos eran asesinos. Algunos de ellos eran violadores. Algunos de ellos violaron a una niña… El ICE está teniendo un excelente desempeño en este momento y continuará haciéndolo todos los días”, declaró Homan.
Entre los arrestados se encuentra un inmigrante salvadoreño identificado como Edward Marlon Rauda Aldana, de 56 años, quien fue detenido en Silver Spring, Maryland. Rauda Aldana enfrenta cargos por delitos sexuales. Además, también fueron arrestados un ciudadano venezolano acusado de asesinato, un mexicano acusado de abuso sexual y un guatemalteco detenido por conducir bajo los efectos del alcohol.
En la ciudad de Miami, el ICE arrestó a seis inmigrantes ilegales de Guatemala, quienes tenían extensos antecedentes penales que incluían agresión, abuso infantil, fraude, resistencia al arresto y vandalismo. Estos individuos fueron detenidos como amenazas a la seguridad pública y por violar las condiciones de su liberación.
Homan destacó que, a pesar de los avances, cerca de 700.000 inmigrantes ilegales, con antecedentes penales, continúan en las calles de Estados Unidos. “ICE está buscando activamente a las personas más peligrosas y las estamos sacando de las comunidades”, aseguró.
El presidente Donald Trump ha prometido continuar con una política de deportación agresiva, con redadas en todo el país, incluyendo en las llamadas “ciudades santuario”. Además, Trump firmó una orden ejecutiva este miércoles que autoriza el despliegue de 1.500 tropas adicionales en la frontera sur para fortalecer la seguridad.
La redada de esta semana marca el comienzo de lo que el gobierno estadounidense ha denominado una serie de acciones renovadas para abordar la presencia de inmigrantes ilegales con antecedentes criminales en el país.