El ministro de Medio Ambiente, Fernando López, presentó este martes el nuevo Dashboard de respuesta para la estimación de métricas de riesgo sísmico, una herramienta tecnológica avanzada diseñada para mejorar la preparación y respuesta ante emergencias sísmicas en El Salvador. Esta plataforma es fruto del proyecto FORCE (Pronóstico y Comunicación de Amenaza y Riesgo por Terremotos) y cuenta con el respaldo de la Fundación Global Earthquake Model (GEM). La presentación fue parte del evento Protegiendo El Salvador: “Fortaleciendo nuestra resiliencia sísmica”.
El ministro López explicó que el Dashboard es una herramienta clave para evaluar el impacto de los terremotos y guiar las acciones de respuesta a emergencias en tiempo real. «Esta es una herramienta para evaluar el impacto sísmico en el país y guiar acciones de preparación y respuesta ante emergencias derivadas de este fenómeno, con modelos de alta resolución para la estimación de amenaza y riesgo sísmico a escala nacional», detalló.
El Salvador, que posee una de las redes de monitoreo sísmico más avanzadas de la región, se ha destacado por su infraestructura de monitoreo, con estaciones ubicadas cada 196 km², lo que supera ampliamente la densidad de monitoreo de países vecinos. Entre estas, se encuentran 14 estaciones de banda ancha que permiten registrar sismos incluso en lugares tan distantes como Japón, Chile e Indonesia, ampliando así la capacidad de análisis y vigilancia sísmica.
La red de 107 estaciones de monitoreo sísmico en tiempo real permite un seguimiento constante de la actividad sísmica y proporciona datos cruciales para la toma de decisiones rápidas. López señaló que la nueva plataforma, diseñada específicamente para tomadores de decisiones, ofrece estimaciones rápidas en minutos posteriores a un sismo, tales como pérdidas económicas, fatalidades y las áreas con mayor potencial de colapso. Esto facilita a las autoridades de Protección Civil priorizar recursos y esfuerzos, asegurando que la atención se concentre en las zonas más afectadas.
Este avance tecnológico es un paso importante en el fortalecimiento de la resiliencia sísmica de El Salvador y la mejora de la capacidad de respuesta ante desastres naturales, un área en la que el país ha demostrado un compromiso constante por proteger a la población y minimizar los riesgos.