En un emotivo acto celebrado este lunes, JD Vance prestó juramento como vicepresidente de los Estados Unidos, rodeado de su familia. La ceremonia, que tuvo lugar poco antes de la toma de posesión de Donald Trump, marcó el inicio oficial de su mandato como número dos del país.

A diferencia del presidente, el juramento del vicepresidente no está especificado en la Constitución de los Estados Unidos, sino que fue establecido por el Congreso y se encuentra en el Código de los Estados Unidos. Este mismo juramento es utilizado por otros funcionarios federales, incluidos los miembros del Congreso.

El juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh, quien tiene la responsabilidad de tomar el juramento a los más altos funcionarios del gobierno, fue quien administró la fórmula a Vance. En su declaración, el nuevo vicepresidente reafirmó su compromiso con la Constitución del país, jurando solemnemente apoyar y defenderla contra todos los enemigos, tanto extranjeros como nacionales.

Vance pronunció las siguientes palabras al tomar el juramento:

“Juro solemnemente que apoyaré y defenderé la Constitución de los Estados Unidos contra todos los enemigos, extranjeros y nacionales; que le tendré verdadera fe y lealtad; que asumo esta obligación libremente, sin ninguna reserva mental o propósito de evasión; y que cumpliré bien y fielmente los deberes del cargo que estoy a punto de asumir. Que Dios me ayude”.

Este momento histórico se produjo minutos antes de que Donald Trump asumiera oficialmente la presidencia de los Estados Unidos, en un evento que definirá los próximos cuatro años del país. Con este juramento, Vance asume su rol como vicepresidente, siendo una pieza clave en la administración de Trump.

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