Los incendios en Los Ángeles, que devastaron grandes áreas de la región, han comenzado a ceder este miércoles, con los bomberos avanzando en la contención de dos de los focos más destructivos. La alerta roja por los incendios ha expirado en gran parte de los condados de Los Ángeles y Ventura, aunque se prevé que los fuertes vientos continúen hasta el jueves, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Hasta el momento, se ha confirmado la muerte de 25 personas como resultado de los incendios, y el alguacil del condado de Los Ángeles, Robert Luna, reportó que 26 personas siguen desaparecidas, 20 en el área de Eaton y 6 en Palisades.
El incendio de Eaton, ubicado en Altadena, ha logrado ser contenido en un 45%, avanzando un 10% desde el martes, aunque ha sido uno de los más letales, con más de 4,600 estructuras destruidas y otras 500 dañadas. Las autoridades advierten que estas cifras podrían seguir aumentando.
El incendio de Palisades, por su parte, ha sido contenido en un 21%, con al menos 1,280 estructuras destruidas y más de 200 afectadas en las aproximadamente 9,600 hectáreas quemadas. El incendio de Auto, que alcanzó más de 24 hectáreas (61 acres) en el condado de Ventura, ha sido contenido en un 85%, y los bomberos lograron frenar un incendio en el condado de San Bernardino que quemó 12 hectáreas (30 acres).
Acciones contra saqueos y aumento de precios injustificados
En medio de esta tragedia, las autoridades también enfrentan el problema de los saqueos. El alguacil Luna informó que 44 personas han sido detenidas en las zonas afectadas de Eaton (36) y Palisades (8), de las cuales al menos 14 están relacionadas con robos, mientras que el resto de los arrestos fueron por violaciones del toque de queda, intrusión y posesión de narcóticos o armas. El toque de queda en las zonas de evacuación sigue en vigor.
Luna advirtió que aquellas personas que se encuentren en las áreas afectadas sin justificación serán arrestadas, reafirmando que “si no perteneces allí, no vives allí, mantente fuera del lugar”.
Por su parte, el fiscal de distrito, Nathan Hochman, aseguró que las personas que intenten aprovecharse de la tragedia para obtener beneficios personales enfrentarán consecuencias severas. Las penas por saqueo podrían ser de 6 a 9 años de prisión, e incluso una pena máxima de cadena perpetua.
Además, Hochman advirtió que aquellos que aumenten de manera injustificada los precios de alquileres o servicios durante esta crisis también enfrentarán sanciones penales y civiles, y serán «avergonzados públicamente». “Si descubrimos que ha defraudado los precios y no ha tomado ninguna medida para remediar la infracción, actuaremos con todo el peso de la ley”, aseguró.
Las autoridades continúan trabajando para controlar los incendios y proteger a la comunidad, mientras se mantienen firmes en su compromiso de frenar los actos de saqueo y la especulación de precios en medio de esta crisis.