El Aeropuerto Internacional de El Salvador “San Óscar Arnulfo Romero y Galdámez” recibió ayer la Certificación de Operador de Aeródromo para el periodo 2019-2024, posicionándolo así a nivel regional y le permite optimizar sus operaciones con más seguridad.
Con el certificado, la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) garantiza que la terminal internacional “posee las capacidades para desarrollar operaciones aéreas bajo estándares mundiales de seguridad operacional, excelencia en el servicio y procesos eficientes”, algo que favorece su posicionamiento y permite atraer más destinos y conexiones, uno de los objetivos del presidente Nayib Bukele para impulsar el país.
El presidente de CEPA, Federico Anliker, mencionó que en los últimos meses la Autoridad de Aviación Civil (AAC) realizó una auditoría en 12 áreas del aeropuerto en las que se superaron satisfactoriamente 20 inconformidades que no permitirán que el aeropuerto obtuviera esta certificación.
“Cada vez que hay observaciones es satisfactorio pues con ello superamos las deficiencias y ahora este aeropuerto cumple con todos los estándares internacionales para operar bajo estándares de calidad y excelencia”, manifestó.
El funcionario también explicó que hasta esta gestión de CEPA se han logrado superar otros 24 procesos auditados por la AAC que se relacionaban con el funcionamiento del Aeropuerto Internacional de El Salvador.
Por otra parte, el presidente de CEPA detalló que se han concluido proyectos de ampliación en áreas como la de chequeo, donde se pasó de 31 a 44 posiciones dobles para atender a pasajeros. En esta zona también se sustituyó el sistema de gradas eléctricas.
El presidente de CEPA, junto a la ministra de Turismo, Morena Valdez, y el director de Migración y Extranjería, Ricardo Cucalón, realizaron un recorrido en el que el titular de la institución portuaria presentó otros avances como la ampliación de los puntos de ingreso de pasajeros.