/Foto ITV El Salvador
Berlín, reconocido como “el pueblo del café”. A sus 43 años, Héctor Ostorga es parte del Departamento de Arte y Cultura de la Alcaldía Municipal de Berlín, del departamento de Usulután. Ostorga es reconocido en el lugar por la originalidad, amor y entrega con la que emprende desde hace dos años su negocio de producción de prendas teñidas en añil.
En la comunidad El Recreo, que posee tierras fértiles y personas trabajadoras, este dedicado artesano pasa muchas horas de su día al cuido de su plantación de añil, considerado un legado y patrimonio cultural, siendo así el único de la zona en producirlo.
Fue a través de un taller brindado por la municipalidad que aprendió un nuevo oficio, la elaboración artesanal de prendas, el cual no imaginaba que le generaría un nuevo ingreso. Actualmente es parte de un grupo de dieciocho artesanos de Usulután, los que en su colectivo a través de sus productos pretenden mantener viva las costumbres y tradiciones de los pueblos indígenas y así fomentar el valor de consumir lo local.
“Desde el momento que usted trabaja en una prenda lo está haciendo con mucho cariño, para que la persona que lo va a comprar quede satisfecha y enamorada de nuestro trabajo. El buen salvadoreño es así: gente trabajadora, aprovecha las oportunidades y tenemos que dar a conocer lo que sabemos y perder el miedo, no importa el lugar donde se emprenda un negocio” aseguró Ostorga.
El artesano cuenta con un taller de obraje instalado en un espacio de su casa, donde lleva a cabo el proceso de extracción del añil.
Son alrededor de tres horas las que se necesitan para la elaboración completa de una prenda en la que aplica diferentes técnicas utilizadas en el teñido como: Batik, Shivori, amarres y fruncidos.
Héctor, por vocación y amor a la cultura, impulsa también proyectos de talleres en diferentes escuelas e institutos para así motivar a los jóvenes a aprender nuevas artes y oficios.